Esta nueva Suite es una adición independiente construida junto a una casa existente en la localidad de Marfa, Texas, de ahí su nombre. El impulso del proyecto nace del deseo de la pareja de propietarios de contar con un espacio íntimo cuando reciban visitas de amigos y familiares. Esta nueva construcción dialoga en su forma y estética con la casa original, una estructura de adobe de un dormitorio llamada Mud House que fue diseñada por Rael San Fratello. La nueva expansión, firmada por el estudio de arquitectura Dust Architects, permite que los invitados puedan permanecer en la vivienda original durante periodos prolongados y la pareja de propietarios se mude a este refugio encantador abierto al paisaje.

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La casa fue concebida como un espacio para invitar y para vivir. Su salón polivalente es buen ejemplo de ello. En este pequeño espacio, cuentan con rincones para relajarse unido a un espacio de teletrabajo. Precisamente, la posibilidad de trabajar de forma remota a raíz de la aparición del Covid-19, fue lo que impulsó a la pareja a mudarse a esta zona de Texas, rodeada de naturaleza.

Un único plano cuadrado alberga las diferentes estancias, todas inspiradas en el paisaje y la luz natural del desierto del lejano oeste de Texas. En la misma sala de estar, se encuentra esta zona para trabajar o estudio, totalmente abierta al paisaje. Este rincón recibe la luz de la mañana y ofrece unas vistas únicas para contemplar la puesta de sol.

Todas las paredes están hechas de ladrillos de tierra comprimida y se ha dejado el material a la vista tanto en la fachada como en los interiores. El color de la tierra invade de esta forma todos los espacios creando una atmósfera única y totalmente alineada con los colores de Texas.

Los propietarios solicitaron una estructura de tierra de bajo mantenimiento que complementaría y preservaría el carácter de la casa original pero sin restarle valor. En respuesta a ello, los principales materiales de construcción son bloques de tierra comprimida, hormigón y vidrio.

En todos los espacios se aprovechó también la entrada de luz natural. Los tragaluces, además, permiten el escape natural del calor. La claraboya sobre la cama del dormitorio proporciona estas ventajas y unas hermosas vistas de los espectaculares cielos estrellados de la región.

Toda la casa está inspirada en el paisaje y la luz natural del desierto de Texas y en la lengua vernácula local de las casas de adobe en Marfa, parte del trabajo de Donald Judd y el pragmatismo poético que poseen los edificios históricos en la zona. El emplazamiento conserva las cuencas visuales y el jardín desértico establecido desde la casa principal hacia el extenso valle y las cadenas montañosas hacia el este.